En 1992 Arturo circunnavego el Lago Ponchartrain en una canoa, cubriendo 108 millas en medio de tormentas y neblina por 50 horas continuas. Los artículos que describen su viaje fueron impresos en "Gatorales", el boletín de noticias del club de remo del Sur de Louisiana llamado Bayou Haystackers. Dichos artículos convencieron a Larry, (acostumbrado a remar a solas), que no muy lejos existía un remador muy dedicado(algunos dicen extremista) a quién sin duda debía conocer.
     Su primer viaje juntos (para Arturo su primero en un kajak) implicó dos travesías de 5 millas desde el río Pascagoula (en Mississippi) hasta Horn Island. Todo sucedió sin ningún contratiempo y los planes se iniciaron para el viaje mas remoto en aguas locales que pudieron imaginar. En el verano del '94 salieron de Venice, LA en dos kayaks individuales, para proceder al Rio Mississippi a salir a Main Pass y viajar a través de la cadena de Chandeleur Island hacia Biloxi, Mississippi. El viaje comprendió 110 millas, 3 travesías de 10 millas o más, una de las cuales de 13 millas conducida durante la noche, una gran tormenta durante una travesía de 10 millas, un choque con una hola gigantesca causando suficiente daño que el kayak necesitó reparo, colonias de pelícanos, innumerables delfines y aves. En resumen, fue un viaje esplendido que los inspiró a viajar juntos la costa de Louisiana en su totalidad y durante el cuál un fuerte lazo fue creado y en dónde sueños y metas fueron formados.
     Durante el resto de la exploración de la costa de Louisiana, (482 millas en 21 días) la amistad crecio y un interés mas grande surgio. Ambos estaban comprometidos a la exploración, a contribuir a la preservación de su propio traspatio: el Golfo de Méjico.
Muchas horas fueron dedicadas tratando de imaginar y resolver los problemas que podría envolver el atravezar el Golfo de Méjico en kayaks. Larry trató, sin ningun suceso (véase http://homepages.gs.net/seacajun/) de convencer a Arturo que sería mas prudente navegar alrededor del golfo envés de atravesarlo. No fue hasta principios del año 2,000 que Arturo le preguntó a Larry si todavía estaba interesado en la circunnavegación. La respuesta es obvia.